La tormenta llegó a Tucumán y dejó familias aisladas. En la región central del país hay más de 4.000 evacuados.

Ya son seis las provincias que sufren las consecuencias del temporal. Suman, en total, más de 4.000 evacuados. En Santiago del Estero los vecinos aún intentan sobrellevar los efectos de la histórica tormenta que se abatió sobre esta provincia el martes por la mañana. Rige aún el alerta climático y agropecuario decretado por el gobierno y hay más de 500 evacuados todavía, en distintos puntos de la provincia.

La tormenta se cobró una víctima: un hombre ciego, de la localidad de Tala Pocitos (a 80 kilómetros de Santiago), murió cuando se derrumbó el techo de su vivienda, en pleno monte santiagueño.

En la capital santiagueña todavía hay algunos evacuados, mientras que en zonas como Los Juríes, Bandera, los departamentos Mitre y Rivadavia en el sur de la provincia, casi en el límite con Santa Fe, y otras zonas del oeste, en el límite con Catamarca, la situación es complicada por las intensas lluvias.

En Catamarca, el mayor desastre se concentró en Bañado de Ovanta. Se inundaron el hospital, la escuela y las viviendas tenían hasta más de un metro de agua. No habrá clases por lo menos hasta dentro de dos semanas ni en Bañado ni en las localidades más afectadas, como Manantiales y Alijilán, además de otros pueblos cercanos al límite con la provincia de Tucumán.

De los 1.000 evacuados que había el martes, ayer habían quedado unos 300 entre autoevacuados y personas que iban a pedir asistencia por alimentos en la Parroquia y en el Hospital de campaña que envió el ministerio de Salud.En San Luis, la localidad de Lafinur sigue siendo la más complicada de las localidades del norte de la provincia a raíz de que se encuentra en una depresión del terreno y las aguas Ain no se va de las casas. Cerca de 600 personas continúan fuera del pueblo para prevenir daños personales.

En Tucumán, en tanto, la lluvia también causó inconvenientes, sin embargo, de acuerdo con la información suministrada por la Dirección de Defensa Civil, no se registraban inundados ni evacuados en todo el territorio provincial. Solo unas 40 familias del Sol de Mayo, localidad del departamento de Graneros, cerca del límite con Santiago del Estero, habían quedado aisladas por las aguas y estaban siendo atendidas por la comuna rural correspondiente y el Ministerio de Desarrollo Social.