El presidente Hassan Rohani pidió no culpar sólo al que apretó el botón, porque “hay otros”.

Los tribunales del régimen no especificaron si se trata de los integrantes de la Guardia Revolucionaria que operaban el sistema de misiles antiaéreos en el momento del disparo letal.

 

El portavoz del Poder Judicial, Gholamhosein Esmaili, explicó en una comparecencia de prensa que se han llevado a cabo “investigaciones exhaustivas y algunos individuos han sido detenidos”, sin dar más detalles.

 

El avión, un Boeing 737 de la aerolínea ucraniana UIA con destino a Kiev, fue derribado al poco de despegar del aeropuerto internacional Imán Khomeini de Teherán al ser confundido, según la Guardia Revolucionaria iraní, con un misil de crucero.

 

Esta tragedia se enmarca en la escalada de la tensión entre Estados Unidos e Irán, país que esperaba un ataque de represalia estadounidense por su bombardeo de horas antes a una base militar en Irak con presencia de tropas norteamericanas.

 

El derribo, negado en un principio por las autoridades persas, ha causado un gran descontento entre la población iraní, que ha protagonizado en estos últimos días varias protestas contra el sistema islámico del país.

 

Debido a la magnitud y controversia de este caso, el presidente iraní, Hassan Rohani, llamó hoy a formar “un tribunal especial con un juez de alto rango y decenas de expertos” para investigar el error que provocó el derribo.

 

“Este no es un caso normal y el mundo entero lo seguirá en nuestro tribunal”, afirmó el presidente, quien agregó que “no se puede culpar a un solo individuo” de la tragedia.

 

Al respecto, indicó que el culpable no es solo la persona que presionó el botón y disparó el misil, sino que “hay otros”, según un comunicado de la Presidencia iraní. Poco antes, Rohani había estimado que se debía “castigar” a todos los responsables de la catástrofe.

 

“Para nuestro pueblo es muy importante que cualquier persona que haya tenido culpa o haya sido negligente en este asunto” sea llevado ante la justicia, dijo el mandatario.

 

Rohani culpó en su discurso a EE.UU., que -dijo- “encendió el ambiente e hizo que la situación fuera anormal”, pero aseveró que eso no quiere decir que no se deban abordar “las causas profundas del incidente”.

 

En el avión viajaban 167 pasajeros, entre ellos 82 iraníes y 63 canadienses, estos últimos en su mayoría con doble nacionalidad, y nueve tripulantes ucranianos.