Los aliados de la dictadura rechazaron las credenciales de la delegación del presidente encargado de Venezuela, pero la iniciativa no prosperó.

El embajador uruguayo, además, abandonó la sesión alegando “una violación de los principios institucionales”.

 

La 49 Asamblea General de la OEA empezó con una batalla por las credenciales. Es que un grupo de países, liderados por México, Uruguay, Bolivia y Nicaragua, pero también respaldada por algunos países del Caribe, exigieron que no se reconozca a la delegación venezolana compuesta por los representantes del gobierno interino de Juan Guaidó.

 

En el reclamo, este grupo alegó que Venezuela había decidido retirarse de la OEA, pero la decisión fue recapitulada cuando más de 50 países desconocieron al régimen de Maduro como poder legítimo de Venezuela.

 

“Quiero llamar la atención sobre el hecho que sobrevuela el episodio de la validez de las credenciales. Si se convalidan las credenciales (por las del enviado de Guaidó) se reconoce un nuevo gobierno de Venezuela y Uruguay eso no lo puede aceptar”, dijo el embajador uruguayo, Ariel Bergamino, quien además anunció que su país decidió retirarse de la Asamblea “sin pretender condicionar, ni ser modelo ni vanguardia de nada” porque, afirmó, se está violando la “institucionalizad de la OEA”.

 

“Uruguay considera que la mejor forma de practicar los principios es ser leales con la institucionalidad de la OEA, retirarnos de esta sesión porque esos principios están siendo vulnerados”, se explicó. Y agregó: “Uno no siempre hace lo que quiere, pero no tiene que hacer lo que no quiere. Nos retiramos de esta reunión pero no de la OEA”.

 

México, Bolivia y Nicaragua mantuvieron su rechazo a la presencia de a delegación de Guaidó pero no siguieron el camino uruguayo. Los tres países latinoamericanos continúan en sus sillas durante la sesión y sólo se limitaron a pedir “una nota al pie” en la resolución para “reservarse el derecho de desconocer lo que se resuelva”.

 

Es que en términos prácticos, la iniciativa de los aliados de Maduro no tuvo consecuencias: la delegación de Guaidó sigue en la 49 Asamblea de la OEA representando a Venezuela.

 

Luego de las manifestaciones de respaldo al régimen chavista, tomó la palabra Argentina, que lideró el apoyo a la delegación del Parlamento venezolano: “Venezuela es a un un Estado miembro porque hubo una manifestación en ese sentido por parte del Asamblea Nacional, por eso se reconoce la presencia de Venezuela, porque representa al gobierno democrático de ese país”

 

Una vez frustrada la iniciativa de los aliados del régimen, el Centro de Comunicación Nacional del gobierno encargado de Venezuela festejó la aprobación de credenciales de su delegación: “En votación histórica: Miembros de la OEA ratifican reconocimiento y participación del Gobierno Legítimo del Presidente encargado Juan Guaidó en la Asamblea General de la OEA, pese a intentos de la dictadura y sus aliados”.

 

Reconocimiento al gran esfuerzo de nuestro embajador @tarrebriceno para lograr nuestra incorporación plena en la Asamblea General de OEA. Un paso importante en nuestra lucha internacional pic.twitter.com/KXqlAjlNUB — CARLOS VECCHIO (@carlosvecchio) June 27, 2019
En abril pasado, la OEA reconoció al diplomático Gustavo Tarre como representante de Venezuela ante el Consejo Permanente, por designación de la Asamblea Nacional, que preside Guaidó.

 

La delegación de Guaidó acreditada para la Asamblea General está compuesta, además de Tarre, por su representante ante el Grupo de Lima, Julio Borges, como jefe de misión, y por otras nueve personas, entre ellas Carlos Vecchio, embajador ante EEUU del líder opositor.