El objetivo del viaje será el diálogo entre las iglesias católica y ortodoxa, así como la condena de la persecución de los cristianos que despliega el ISIS en Oriente Medio.

El Papa Francisco aterrizó hoy en el aeropuerto de Ankara, donde fue recibido con una ceremonia oficial por el ministro de Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, en el primer acto de una visita de tres días a ese país.

Turquía es hoy un centro de poder estratégico, en los confines del Califato del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), empeñado en desplegar su poder belicoso y fundamentalista que persigue sin piedad a la minoría cristiana.

Está previsto que desde el aeropuerto el Papa visite el Mausoleo de Mustafa Kemal Ataturk, fundador de la Turquía moderna, y luego se reúna con el presidente Recep Tayyip Erdogan en el Palacio Presidencial, recién inaugurado y en el que Francisco será el primer huésped.

El sábado y domingo en Estambul el objetivo principal del viaje, que es ecuménico, será encuentro y nuevo abrazo con el patriarca ortodoxo de Constantinopla (el antiguo nombre de Estambul), Bartolomé I.