“La Pulga” cerró el año con el Barcelona. Se consagró como el máximo goleador europeo y dijo adiós a una sociedad futbolística más que exitosa con “El Cerebro”.

Lionel Messi cerró otra gran temporada con el Barcelona. A nivel colectivo, sumó un nuevo título en la Liga de España y otra Copa del Rey. En el plano individual, se consagró como el máximo goleador de Europa en la temporada 2017-2018 con 34 conquistas y recibió la Bota de Oro por quinta vez en su carrera, algo que nadie había conseguido antes en la historia. Antes la había ganado en 2009-2010, 2011-2012, 2012-2013 y 2016-2017.

 

En el partido ante la Real Sociedad, correspondiente a la 38° y última fecha del certamen ibérico, el rosarino fue suplente. El entrenador Ernesto Valverde prefirió darle descanso para cuidar su físico en el cierre de una exigente temporada. Sin embargo, lo hizo ingresar a los 21 minutos de la segunda parte para que pudiese tener una última función con uno de los mejores socios futbolísticos que ha tenido a lo largo de su carrera: Andrés Iniesta.

 

“El Cerebro” jugó su último partido con la camiseta del Barcelona y Messi pudo ser parte del emotivo momento. Una vez finalizado el encuentro -que terminó con victoria por 1-0 para los catalanes-, ambos se fundieron en un sincero abrazo en medio del campo de juego.

 

En los pocos minutos que estuvo en cancha, “La Pulga” tuvo una sola situación de gol, con un cabezazo que contuvo el arquero. A pesar de que no marcó, selló una nueva Bota de Oro. Con 34 goles, dejó en segundo lugar al egipcio Mohamed Salah, que marcó 32 en la Premier League con el Liverpool.

 

En la previa, además, “Leo” había recibido de manos de Xavi el premio al mejor jugador de la Liga en el mes de abril.

 

A partir de ahora, Messi dejará atrás al Barcelona y pondrá el foco en el gran objetivo que se viene: el Mundial de Rusia 2018 con la selección argentina. El delantero viajará en las próximas horas al país para sumarse a los entrenamientos del equipo de Jorge Sampaoli en el predio de Ezeiza.