El secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández,

calificó de “gran invento” lo expresado ayer por Diego Lagomarsino en la declaración a la prensa que brindó junto a su abogado defensor para explicar por qué le prestó su arma al fallecido fiscal Alberto Nisman.

En ese marco, el funcionario advirtió que los dichos del técnico informático que trabajaba junto a Nisman en la UFI-AMIA “no tienen consistencias”.

“Si uno escucha con atención, la inconsistencia de sus declaraciones se van motorizando segundo a segundo”, dijo Fernández al hablar con los periodistas ante de ingresar a Casa de Gobierno.

Agregó que la declaración “parece que está armada de forma tal que lo que se diga lo dejará de la mejor manera parado a este señor”.

Asimismo, reiteró la denuncia formulada por el abogado José Iglesias, padre de una víctima de la tragedia de Cromañon, quien dijo haber visto al asesor de Nisman tomando fotos en marchas.

“Quien dice que Lagomarsino iba a las marchas de Cromañón y a la casa del doctor Iglesias es el propio Iglesias. Lo declararon Iglesias y Beatriz Campo, su entonces pareja. Qué estaba haciendo (allí) tendrá que explicarlo Lagomarsino”, apuntó el ex senador kirchnerista.

También, Aníbal Fernández se mostró dispuesto a brindar su “testimonio” en el marco de la causa que investiga la muerte de Nisman.

Si la jueza Fabiana Palmaghini “entiende que es necesario, oportuno y conveniente, lo haré”, dijo el funcionario, y acotó: “Nunca me he guardado nada de lo que digo”.

Ayer, el abogado defensor de Lagomarsino, Maximiliano Rusconi, dijo que pedirán a la Justicia que se cite a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y al secretario general de la Presidencia

por sus dichos sobre su cliente, quien se encuentra imputado en la causa.

En tanto, consultado sobre las declaraciones de la fiscal Viviana Fein, quien ayer sostuvo que el regreso de Nisman de sus vacaciones por Europa no fue imprevisto, sino que ya había sido planificado, el funcionario nacional recordó que el propio investigador del caso AMIA había enviado a sus amigos más cercanos un mensaje para informarles de su vuelta anticipada al país.

“Lo que dice el Whatsapp es lo que sucedió”, concluyó Aníbal Fernández.